Martín Sánchez Treviño
Aspirantes priístas disputan los distritos de Reynosa
Según los resultados del examen planea que aplica el gobierno federal, el Estado de Tamaulipas se ubica en el lugar número 27 solamente por encima de los estados de Guerrero y Tabasco. Esta pudiera ser una premisa para fortalecer las especulaciones sobre la salida de Julio Pimienta Prieto de la Subsecretaria de Educación Básica. Pero ese postulado resulta insostenible, sin en retrospección se observa que Tamaulipas reculó en el renglón educativo en los últimos doce años de los gobiernos priístas.
En cuyo periodo de dos sexenios lo mismo estuvo un “Polito” que un “Ferretero” como titulares de la Secretaria de Educación. Que ciertamente no heredaron esas posiciones de las administraciones de Tomás Yarrington y Manuel Cavazos Lerma, en las cuales el estado si bien no ocupaba los primeros lugares en los exámenes de evaluación, tampoco estaban en el sótano.
Estudios han ido y han venido, lo mismo que eruditos en materia educativa y en educación Tamaulipas sigue rezagado. También hay antecedentes de que es un estado propulsor de la educación, por las ilustres figuras originarias de esta región. Lo mismo ha habido matemáticos, que pedagogos, físicos y especialistas en otros renglones.
De todo esto se desprenden dos elementos que pudieran resultar certeros. Uno es que se trata de un estado con un priísmo que en su arraigo dejo severos vicios y prácticas nocivas en el cuerpo de docentes, investigadores, dirigente sindicales y titulares inapropiados para dirigir la encomienda de la educación, como fue que un Ferretero haya ocupado la secretaria de educación, como fue el caso de José Manuel Assad Montelongo.
El reto educativo pareciera que tiene “la vara” muy alta y por lo mismo hay quienes consideran que otro elemento se debe a que los titulares del sector educativo han sido incapaces de aterrizar los contenidos, las metas, los planes y programas hacia quienes construyen la educación básica en el barrio, la colonia, el fraccionamiento o el poblado. Con un gremio sindical consentidor y promotor de un proteccionismo magisterial desmedido.
De ahí que sólo algunos docentes y especialistas tengan argumentos para postular los mecanismos que le permitan a Tamaulipas ocupar un sitio más digno, en los estándares de las calificadoras nacionales. Que la autoridad, pudiera argumentar que depende de la interpretación. Lo cual es válido si lo que se busca son justificaciones.
Sobre todo porque en esta región noreste también están entidades como Nuevo León, cuyos avances son tangibles cuando circunstancialmente alumnos de esa entidad se inscriben en escuelas de educación básica de Tamaulipas y muestras mayores habilidades y destrezas ante los contenidos. Y en esta última evaluación Coahuila ocupa los primeros lugares.
Otras causas pudieran ser la permanencia en el sector educativo de algunos “ancianos nocivos” y ciertos directivos, que contagian de sus vicios a las nuevas generaciones de docentes, que llegan a sus puestos con toda la intención de ofrecer lo mejor a los estudiantes.
En otro orden, al cierre de este espacio se habían registrado por el PRI para senadores Alejandro Guevara Cobos y Yalhel Abdalá, Juan De Dios Carrizales por el distrito Uno con cabecera en Nuevo Laredo, en el Tres la diputada local Yesenia Hernández, en el Cuarto Anto Tovar, en el Quinto con cabecera en Ciudad Victoria, Alejandra Cárdenas Castillejos, en el Sexto ayer se registró Florentino Saenz, en el Séptimo Griselda Carrillo Reyes hija del ex alcalde de Altamira Sergio Carrillo Estrada, en el Octavo Elvira Olguera Altamirano y en el Noveno la ex diputada local y secretaria del PRI estatal reinosense Aída Zulema Flores Peña.
En este último también se registraron Gustavo Rico Saro y Alan Alexander Arjorna, Mientras que en el distrito Dos figura la terna de Humberto Valdez, Benito Saenz y Dulce Nava. Lo que indica que en los distritos de Reynosa es donde el PRI pareciera presentar mayor competencia.
