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En medio de la polémica por el plan contra el robo de combustibles desplegado por su gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que teme por su vida pero aseguró que no es “cobarde” y, por ello, seguirá adelante con las acciones de su administración.

“El que lucha por la justicia no tiene nada que temer, eso es lo que puedo contestar, y soy un ser humano, como todos los seres humanos tengo miedo, pero no soy cobarde”, dijo el mandatario la mañana de este lunes, tras ser cuestionado en su habitual rueda de prensa.

Durante el décimo día de contingencia por el abasto de gasolina y diésel en distintos puntos del país, el presidente y su equipo de gobierno dieron avances sobre su plan contra el robo de combustibles, que inició a finales de diciembre pasado.

López Obrador aseguró que, a pesar de las molestias, cuenta con apoyo de la ciudadanía en el combate al llamado huachicol, que ha derivado en la apertura de 1,700 carpetas de investigación, según informó este lunes la Fiscalía General de la República.