Por Roberto Aguilar

Ciudad Victoria.- Unas horas antes de ingresar al quirófano, Raquel Oranday Pacheco le comentó a su hermana Liliana lo siguiente: “Nunca me imaginé que la niña que yo cargaba de bebé, ahora es quien me va a regalar una segunda oportunidad de vivir”.

El 29 de agosto Liliana le donó un riñón a su hermana Raquel, en una cirugía que encabezó el doctor Jorge R. Salinas Graham, en el Hospital Regional de Alta Especialidad de Ciudad Victoria.

En plena recuperación, ambas relataron la extraordinaria experiencia que ha significado en sus vidas para las dos hermanas que son originarias de la ciudad de Reynosa.

Raquel relató que cuando el especialista le dio la noticia que sus riñones estaban muy mal, lo primero que hizo fue negarse, “esto no puede ser cierto, no me puede estar pasando. Mi vida era bastante normal”, fueron sus palabras. Estaba en “shock”. Devastada.

“Nos fuimos a Monterrey, Nuevo León, buscando una segunda opinión. El nefrólogo me dijo tienes dos opciones hemodiálisis o hemodiálisis. Le pregunté por la posibilidad de un trasplante y me dio sus razones del porque el trasplante no era para mí”, mencionó Raquel.

Pero ella y su familia no se dieron por vencidos. Investigando su esposo por internet dieron con el Hospital Regional de Alta Especialidad de Ciudad Victoria.

“Fue una grata sorpresa, primero al saber que en nuestro estado se hacen estos trasplantes y también por el excelente trato que desde el principio recibimos. Encontré mucha esperanza, en las enfermeras, en el personal”, explicó.

El 29 de agosto, a las 10:33 horas, el doctor Salinas escribió en su cuenta de Facebook: “Trasplante renal entre hermanas. Iniciamos”. Aproximadamente a las 15:00 horas concluyó de forma exitosa la intervención quirúrgica.

En los días posteriores, en la puerta del cuarto de hospital donde se recuperó Liliana, un letrero refleja lo que ella es en estos momentos para sus amigos y familiares: “Héroe, donador de riñón”.

En entrevista, Liliana agradeció la comprensión de su esposo, quien en todo momento la apoyó para la decisión que tomó de donar un riñón a su hermana.

“Nosotros somos una familia afortunada porque dimos con este lugar donde han sido unos ángeles para nosotros, todos y cada uno de los doctores, el trato aquí es de otro nivel”, comentó.

Y añadió: “Me emociona, me siento una mujer bendecida, por tener algo con lo que mi hermana podrá sentirse mejor”.

En tanto, las palabras de Raquel son de eterno agradecimiento: “Quiero agradecerte todo lo que hiciste por mí al donarme tu riñón me regalaste una segunda oportunidad de vivir. De ver crecer a mi hija, de estar con mi esposo, con la familia y los amigos que amamos”.

Le agradeció por no desistir jamás, aunque a veces sus bebés se quedaban llorando porque ella se iba, “tú te mantenías firme, incluso dándome ánimos a mí. Muchas gracias por tener ese corazón, nunca dudaste en hacerlo. Las palabras nunca van a ser suficientes para agradecerte todo lo que hiciste por mí”.

En el Centro Estatal de Trasplantes informaron que en la entidad hay 24 pacientes en lista de espera para un trasplante de riñón, 17 en el Hospital Regional de Alta Especialidad de Ciudad Victoria y 7 en el Hospital General.